Cocinar a leña en Perú es una tradición que ha sido transmitida de generación en generación. Lamentablemente, esta forma de preparar los alimentos hace que muchas mujeres sufran de dolores de espalda, enfermedades respiratorias, cataratas, entre otras.

María Vitalia, nuestra primera beneficiaria en Yonán, Cajamarca, nos contó que desde que tenía 28 años sufría de dolores de espalda. Siempre cocinó sus alimentos agachada o “doblada en dos”, como suele decirle y, hasta sentada. Ahora, con casi 85 años, los dolores se han intensificado.

Luego del proceso de construcción de la cocina mejorada, María, afirmó que será la primera ves que cocinará de pie y totalmente erguida. “Muchas gracias al proyecto Tullpa+. Desde que tengo uso de razón nunca he preparado mis alimentos parada”, dijo.

Virginia Ruiz, otra de nuestras beneficiarias en Cajamarca, nos permitió conocer más de su familia y contarnos por qué es necesaria cambiar una tradición (cocinar tradicionalmente) aprendida por su abuela.

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